Software dental en la nube ¿Qué tan protegida está la data de tus pacientes?

Algunos datos de interés sobre los registros electrónicos de salud (HCE) y los software dental en la nube

• ¿Sabías que, según datos del año pasado, 9 de cada 10 médicos utilizan los registros electrónicos de salud (EHR)?

El crecimiento de la data digital ha sido vertiginoso. En poco más de diez años la tasa de uso se ha duplicado, pasando del 42% al 87%.

De hecho, en la actualidad cerca del 90% de los hospitales poseen tecnología EHR.

• Las probabilidades de que un médico posea un tablet superan en 250% al consumidor promedio

Los profesionales de la salud han acogido con entusiasmo las nuevas tecnologías de comunicación y almacenamiento de datos en un software medico. La comodidad de acceso a las historias médicas de sus pacientes y la facilidad de almacenaje se apuntan como las principales causas de esta popularidad.

Se estima que más del 85% de los médicos y enfermeras utilizan tablets para su ejercicio profesional.

Asimismo, el 66% de los pediatras afirma utilizar los mensajes de texto como principal canal de comunicación con sus pacientes fuera de la consulta.

• 50% de los usuarios de smartphones y tablets ha descargado y utiliza con frecuencia apps de salud.

Esto quiere decir que la mitad de los 3.4 mil millones de usuarios de estos dispositivos tiene la posibilidad de gestionar sus registros de salud en el momento en que lo desee y desde el lugar que prefiera.

En el caso de los Estados Unidos, los usuarios declaran utilizar las apps de salud para:

• • Manejar asuntos relativos a la salud (66%)
  • Comunicarse con sus médicos (61%)
  • Programar alarmas y recordatorios para medicarse (46%)
  • Hacer un seguimiento preciso de los síntomas de una enfermedad (45%)

Métodos de almacenamiento digital

Existen diferentes modalidades de almacenamiento digital, en función del tipo de datos que se manejen, las necesidades de acceso compartido y la tecnología involucrada. Podemos distinguir entre:

• Almacenamiento por niveles

Requiere del empaquetado o encapsulamiento de datos. Es decir, la información se divide en bloques o unidades de datos, cada una de las cuales tiene diferentes niveles de disponibilidad y requiere de autorizaciones de acceso distintas.

Al tratarse de data compartida es indispensable que haya conectividad en red, sea local o remota.

De esta manera, es posible almacenar “paquetes” de información en un disco duro o servidor local y enviar a la nube aquellos que no se necesitan inmediatamente o de manera recurrente.

• Sistemas de almacenamiento y transmisión de imágenes PACs

Es una tecnología especialmente diseñada para el almacenamiento, a corto y largo plazo, de imágenes médicas. El sistema se encarga automáticamente de la obtención, manejo y distribución de las mismas.

• Almacenaje en la nube

Este término, que ya ha pasado a ser de dominio público, se refiere a los softwares y servicios de almacenaje y transferencia de datos que se ejecutan en Internet. Es decir, en lugar de efectuarse las operaciones en el disco duro de un ordenador o servidor local, se hacen de manera remota. Una de sus principales ventajas es la facilidad de acceso, pues el usuario puede visualizar la información desde cualquier dispositivo con conexión a la web. Además, permite el trabajo colaborativo, pues la data puede ser vista y modificada por tantas personas como se necesite.

• Métodos de almacenamiento híbridos.

Como su nombre indica, se trata de la combinación de múltiples formas de almacenaje, para garantizar la seguridad de los datos. Parte de la información se almacena o respalda en la nube, mientras que otra se archiva en servidores locales.

Riesgos de datos de salud

Si bien estas tecnologías ofrecen muchas ventajas, también es cierto que generan temores por la seguridad de la data.

Un estudio reciente reveló que el 90% de los usuarios fue víctima de violaciones de sus bases de datos en los últimos dos años. Esto se refiere tanto a ataques o alteraciones de la información, como a accesos no autorizados.

Solo el año pasado se registraron 253 violaciones a bases de datos de salud en Estados Unidos. La cifra adquiere connotaciones alarmantes, pues se ha determinado que esos ataques lograron vulnerar la data de 112 millones de historias médicas. Es decir, afectaron a un tercio de la población estadounidense.

La mayoría de esos ataques fueron realizados por hackers, y ocasionaron pérdidas anuales en el sistema de salud de más de $5.6 mil millones de dólares.

Los ataques al Anthem Blue Cross y al Premera Blue Cross fueron dos de los más escandalosos. El primero vulneró 78.8 millones de historias médicas, mientras que el segundo alcanzó a 11 millones de usuarios.

¿Cómo proteger los datos de tus pacientes?

Seguramente estas líneas te han puesto a dudar. Son innegables los beneficios de los registros electrónicos de salud, pero hay un riesgo real para la seguridad de los datos de tus pacientes.

Sin embargo, el panorama no es tan sombrío como parece. Existen varias formas de garantizar la protección de los datos, que te ayudarán a resguardar la información.

En primer lugar, es una buena idea realizar un análisis anual de seguridad HIPAA, para verificar que las herramientas de almacenamiento estén protegidas.

Igualmente, conviene encriptar toda la data almacenada en dispositivos móviles, como smartphones o tablets, para que esté a salvo en caso de que te roben el teléfono o se extravíe.

Asimismo, es indispensable que el personal de salud con acceso a las historias médicas de los pacientes esté consciente y sepa cómo archivar y enviar data de manera segura. Medidas tan simples como usar claves de acceso complejas, cerrar la sesión al terminar el uso de redes y evitar el uso de dispositivos personales para consultar información de sus pacientes, contribuyen a minimizar los riesgos de vulneración de la data. Sin embargo, estas recomendaciones no siempre son acatadas, pues al menos el 14% de los médicos almacena data de sus pacientes en sus teléfonos personales, sin encriptarla ni proteger sus dispositivos con claves de acceso.

Consideraciones similares aplican para los pacientes. Un dato curioso (y al mismo tiempo preocupante) es que el 22.3% de los usuarios de apps de salud comparte sus claves de acceso con otras personas.

Existen también procedimientos de seguridad que deben ser previstos por los administradores de la red. Por ejemplo, deben garantizar que todos los servidores cuenten con borrado o inactivación remota y mantener al día los cortafuegos o Firewalls y el software de seguridad de la red.

Si tienes dudas acerca de la seguridad de los datos de tus pacientes y no confías en las soluciones tecnológicas que utilizas, visita XdentalCloud. Su avanzado software dental, está respaldado por Microsoft Cloud. Con él podrás acceder a las historias clínicas y odontogramas de tus pacientes, desde cualquier lugar y con cualquier dispositivo, con la certeza de que la información está bien protegida. Con XdentalCloud puedes configurar diferentes niveles de acceso para cada documento, asignando permisos diferenciados por jerarquía y/o función.

También podrás hacer un seguimiento efectivo de las visualizaciones o alteraciones de las historias, pues te permite llevar el registro de quiénes han accedido a la data y qué modificaciones han efectuado.