Problemas comunes en la gestión de una clínica dental
Hay muchas situaciones que pueden entorpecer el día a día de la práctica odontológica. La mayor parte de las veces, se trata de problemas que no guardan relación con la complejidad de los casos atendidos o con asuntos de salud, sino con circunstancias relativas a la gestión de la consulta dental.
Por ello hemos querido hacer una nota sobre los problemas más comunes en la administración dental y cómo encararlos con éxito.
Sigue leyendo y comprobarás que este dolor de cabeza tiene una fácil solución.
1. La competencia
La odontología es una de las especialidades médicas con mayor crecimiento en los últimos tiempos. Cada año egresan de las facultades de todo el mundo cientos de miles de dentistas, lo que ha llevado a una sobreoferta en algunos países. En España, por ejemplo, hay casi 1 profesional por cada 1.000 habitantes, y en Chile, hay apenas 690 habitantes por especialista. Para darnos una idea de lo que esto significa conviene recordar que la Organización Mundial de la Salud recomienda una proporción de 1 dentista por cada 3.500 habitantes.
Esto supone un desafío para la gestión dental, pues hay una competencia abrumadora. Sin embargo, no todo son malas noticias, pues existen herramientas que te ayudan a identificar nichos de mercado y dirigir tus acciones al segmento de pacientes que te interesa.
Nunca viene mal aplicar algunas estrategias de mercadeo para mejorar el rendimiento de tu consulta. Así, lo primero que debes hacer es estudiar a la competencia. Para ello deberás considerar los centros que ofrezcan los mismos servicios de tu clínica y que apunten al mismo público. Si tu especialidad es la ortodoncia infantil deberás considerar todas las clínicas dentales que se enfoquen en este tipo de tratamientos. Estos centros formarán parte de la lista de opciones de tus pacientes objetivo y tu meta es diferenciarte de ellos y destacarte.
No solo deberás saber cuáles son y dónde se encuentran ubicados, sino también deberías conocer sus tarifas, las facilidades que ofrecen a sus pacientes, cómo son percibidos por el público, etc.
Toda esta información te será de mucha utilidad para diseñar una estrategia de promoción diferenciadora, que te permita captar más clientes y mejorar la rentabilidad de tu consultorio dental.
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2. Equipo de trabajo poco motivado
El factor humano es crucial para el éxito de cualquier iniciativa, y más aún cuando hablamos de actividades que involucran la atención al público. Mantener motivados a los miembros de tu equipo es indispensable para brindar a tus pacientes un servicio de calidad. Además de ofrecer una remuneración acorde a sus obligaciones, asegúrate de crear un ambiente de trabajo positivo y disponer de condiciones que les permitan llevar a cabo sus funciones con la mayor comodidad.
¿Cómo motivar a los empleados de tu clínica dental?
En realidad, no se trata de ideas exclusivas del entorno de la consulta odontológica, sino que son aplicables en cualquier relación laboral
- Comparte las metas y objetivos con tu personal. Es muy importante que todos y cada uno de tus empleados se sientan comprometidos con el logro de las metas. Cada uno de ellos tiene algo que aportar y una buena gestión dental solo será posible con la colaboración de todos los trabajadores.
- Honor a quien honor merece. Valora el trabajo que cada uno de los miembros de tu equipo desempeña y reconoce sus logros. Esto generará un aumento de su confianza y autoestima, que les llevará a asumir un mayor compromiso y les motivará a dar lo mejor de sí mismos en cada actividad.
- Mantén tus oídos abiertos. Es importante que estés siempre dispuesto a aceptar sugerencias y quejas, así como a responder preguntas e inquietudes de tus colaboradores.
- Predica con el ejemplo. La mejor manera de transmitir entusiasmo a tus empleados es demostrándolo tú mismo. Tú debes ser el modelo a seguir, con tu buena actitud, puntualidad, cordialidad y tesón.
- Comunícate. La comunicación constante y fluida mejorará el clima laboral y mantendrá a todo tu personal en sintonía con los objetivos.
3. Interactúa con los pacientes
Recuerda siempre que tus pacientes acuden a la consulta en busca de una solución a su problema. Es de vital importancia que les escuches, des respuesta a sus preguntas y te asegures de que entienden lo que les has explicado. El trato amable y cercano les hace sentirse más seguros y confiados e incrementa sus niveles de satisfacción.
La poca comunicación con los especialistas es una de las principales quejas de quienes acuden a los servicios de salud. La saturación de los centros, el escaso tiempo que los profesionales dedican a atender las inquietudes de los pacientes o resolver sus dudas son motivo de desagrado y pueden disuadir a un paciente de acudir a tu consulta. En ese caso, no solo estarías perdiendo a un cliente, sino también a todos los que él podría referirte. No hay mecanismo de promoción más efectivo que el “boca a boca” y su coste es prácticamente nulo. Hablar con tus pacientes y comunicarte de forma efectiva es la mejor inversión que puedes hacer en pro del crecimiento de tu clínica dental.
Tampoco olvides contar con un buzón de sugerencias y realizar periódicamente encuestas de satisfacción que te permitan detectar áreas susceptibles de mejora en tu consulta.
4. Gestión administrativa deficiente
La gestión de una clínica dental es una tarea indispensable para mantenerla operativa y optimizar la rentabilidad de la consulta. En un primer momento podría pensarse que todo se limita a un control de facturación e impuestos, pero en realidad es una labor mucho más compleja.
Con una adecuada herramienta de gestión dental podrás saber exactamente cuál es la inversión en equipos y materiales para cada tratamiento, así como llevar un estricto control de inventario, optimizar tu agenda de citas y, en definitiva, mejorar el rendimiento de la clínica.
Conoce al detalle el funcionamiento de la consulta como negocio. Podrás detectar las oportunidades de mejora e identificar los puntos fuertes para potenciarlos.